PROGRAMA #11 (Vea - Terapia de la depresión y la angustia)

FORMULA PARA TRANSFORMAR EL ESTADO INTERNO INSTANTANEAMENTE:

 

Antes de realizar una tarea,

detente un momento,

piensa en el efecto que tendrá

y después comiénzala.

 

Resumiendo tendremos la siguiente formula:

 

SOLTAR todos los músculos del cuerpo y la respiración. Específicamente se trata de relajar los dedos de las manos y respirar con el estomago.

 

OBSERVAR los propios pensamientos. Esto incluye estar consciente de lo que ocurre en el exterior, pero principalmente los sentimientos internos.

 

DIRIGIR el proceso del pensar. El pensador, el yo, ejerce su primaria libertad, la cual es elegir los tipos de pensamiento que quiere tener. La puerta de entrada al autocontrol es: "Yo soy un ser de paz"; fiel al principio que "En lo que piensas en eso te conviertes".

 

AMAR a todos y a todo. El poder del amor neutraliza el temor que se esconde detrás de toda forma de estrés, restableciendo la armonía. Evoca tu amor, pero no lo confundas con arrogancia si es amor propio, con apego si esta dirigido a otros seres humanos. El único apego que trae beneficio es el apego a Dios.

 

Hazlo con confianza y con una actitud donadora. Amar es tener un corazón tan grande que quepa toda la humanidad.

 

Patrones de comportamiento y respuestas autocreadas emergen en tiempos difíciles. Conectándote con tu YO real, como ese punto de energía luminosa, resplandeciente y en el Ser Supremo, te permite crear un estado de “observador desapegado”, para luego actuar con precisión, libre de la trampa de los pensamientos inútiles o negativos, y focalizado en tu alto propósito y valores.

SE UN ACTOR HÉROE LIBERÁNDOTE DE LAS ILUSIONES Y DE LAS DESILUSIONES

Parados bien firme en el presente, aceptando la realidad de la existencia como nos tocó vivirla, entender el significado o mensaje de cada escena y percibir de antemano el resultado de mis acciones, ver el positivo detrás de lo negativo, cómo nuestras decisiones afectan nuestra paz. Desde el presente podemos monitorear el pasado y el futuro, pero tenemos que ponernos las lentes del positivo y rescatar la riqueza del pasado que nos sirva de plataforma en el presente para proyectarnos al futuro con la convicción que será exitoso.

Si cometiste un error, pregúntate: A. ¿Qué positivo me enseñó? B. ¿Cómo lo puedo integrar en la actualidad? C. ¿Cómo puede redireccionar mi plan de vida?

Otro punto para reflexionar que te puede servir para centrarte en el presente es:

¿Qué significado tiene el hecho de que Cristo, Nostradamus, Profetas, astrólogos, brujos, pitonisas, etc. hayan predicho el futuro? ¿La capacidad de vaticinar el futuro no significa que este ya está fijado? Lo que pasó, pasó; lo que sucederá, sucederá. “Nada nuevo”. Haz del presente un éxito y vive libre de preocupaciones.

Pero ante todo, HOY:

1- Veré el positivo -sin juicios malsanos, veré a los demás como quiero que ellos me vean y me traten y así estaré feliz.

2- Hablaré con paz - transmitiendo paz, siendo cortés, gentil, considerado. Hablaré menos, lentamente y dulcemente.

3- Actuaré con paz - sin prisa, lo que me garantizará menos gastos, accidentes y tensiones. Me preguntaré: Hay algo digno que yo renuncie a mi paz?

4- Sentiré que pasado es pasado -con una nueva visión hacia el futuro, viendo el beneficio solamente. De esta manera, comprensiva y amorosa, me perdonaré y perdonaré a los demás; esta actitud me mantendrá en paz y contento, comprometido con el cambio.

5- Estaré estable -a nada le permitiré robarme mi paz. Estaré atento para no permitir que hábitos no deseados emerjan. Me prometo estar calmado y buscaré la sabiduría y virtud para hacerlo.

A veces nos enfrascamos en discusiones de si hay vida después de la muerte; la cuestión esencial es si hay vida antes de la muerte. No hay pasión por la vida, no se siente esa magia de vivir, ese incuestionable recurrente milagro de la vida. La maravillosa vida se ha vuelto desprovista de significado, vacía, seca, pesada, aburrida. El amor, que es la savia de la vida, se ha vuelto físico, mecánico, sin color.

Es hora de desarraigar las actitudes negativas, levantar las anclas del pasado y frenar la carrera de los pensamientos hacia el futuro. Podría asegurar que libertad es cumplir mis responsabilidades y estar completamente en el presente. Vivamos más aquí y ahora nuestra maravillosa existencia.

LA PERLA Y EL PERDON

Una perla surge cuando la ostra cubre con células de nácar al grano de arena que entra en su interior y cicatriza el rastro que el mismo le dejó.

El perdón emerge cuando comprendo que las heridas recibidas son profesores que me ayudan a crecer y las puedo transformar en fortaleza, cubriéndolas con capas de amor y gratitud.

 

 

Así como la perla tendrá un gran valor para alguien en el futuro, tengo la seguridad que mi futuro será mejor, más valioso.

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